CONSIDERACIONES
SOBRE EL TIRO OLIMPICO
Aunque en España
el tiro haya cumplido ya el centenario conmemorativo de su creación
como actividad deportiva organizada, es un deporte que sigue imbuido
con un espíritu de avance y superación que lleva,
a quien lo practica, a buscar nuevos caminos de mejora.
Los antecedentes
históricos, en cuanto a la aparición del tiro como
deporte en España, se remontan a la segunda mitad del siglo
XIX.
El 23 de junio
de 1894, con participación extranjera fue aprobada la propuesta
del Barón Pierre de Coubertin y se constituyó el
Comité Olímpico Internacional; en 1896 se celebraron
ya los primeros Juegos en Atenas, con participación del
Deporte de Tiro. En 1900 se celebraron los segundos Juegos Olímpicos
en Paris y el mayor numero de atletas lo aporto el Tiro. No hay
que olvidar que Coubertin era francés y Campeón
de Tiro de Francia. En estas Olimpiadas España consiguió
su primera medalla Olímpica de toda la historia, de la
mano de Pedro Pidal, Marqués de Villaviciosa; precisamente
en una prueba de Tiro.
En la actualidad
el Tiro Olímpico resulta bastante desconocido, a pesar
de ser un deporte muy completo, que necesita tanto de un esfuerzo
físico como mental y que no entraña ninguna peligrosidad;
la Mutualidad General Deportiva que cubre los Accidentes y asistencia
medica de nuestros deportistas, considera a la Federación
Española de Tiro Olímpico como de mínimo
riesgo, es decir, como las federaciones de Petanca, Ajedrez, etc.,
lo que da idea del sentido de responsabilidad de sus tiradores
y la seguridad en los polígonos de tiro.
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